La recuperación completa del mercado de petróleo no será historia de dos días, más bien podría ser cosa de dos años. La demanda de petróleo en 2020 caerá de media en 8,1 millones de barriles por día, la mayor reducción anual en la historia, mientras que en 2021 aumentará en 5,7 millones de barriles por día (mbd), lo que seguirá dejando la demanda por debajo de los niveles vistos en 2019. Esto quiere decir que la demanda de crudo no se recuperará por completo hasta, al menos, el año 2022, según la Agencia Internacional de la Energía.
"La caída del consumo del combustible que se usa para los vuelos afectará a la demanda total de petróleo hasta al menos 2022", sentencia la AIE en su informe perteneciente al mes de junio.
No obstante, hay buenas noticias para el crudo o, al menos, no tan malas. La AIE cree que el desplome de la demanda de petróleo este año será menos intenso de lo que pronosticó en mayo, porque varios indicadores, en particular en China, apuntan a que la movilidad tras el confinamiento está siendo mayor de lo previsto.
Pequeña revisión al alza
En su informe, la AIE calcula que el mundo absorberá este año una media de 91,7 millones de barriles diarios, lo que significa 500.000 barriles diarios más de lo que había anticipado en mayo.
También se ha constatado una importante recuperación en la India en mayo, aunque allí hasta unos niveles netamente inferiores a los del pasado año. Y se espera que en la segunda mitad del año las medidas de la desescalada en otros países contribuyan a acelerar ese repunte.
En su primera previsión para el conjunto de 2021, la agencia -que reúne a buena parte de los países de la OCDE- pronostica que el consumo de petróleo crecerá en 5,7 millones de barriles diarios hasta 97,4 millones.
Pese a ese incremento, el consumo seguirá 2,4 millones de barriles diarios por debajo del de 2019, lo que se explica en gran medida por la situación de la aviación, particularmente castigada por la crisis del coronavirus y que tardará mucho en recuperarse.
Teniendo en cuenta las proyecciones de la Asociación del Transporte Aéreo, que anticipa que el tráfico este año será un 55% inferior al del pasado ejercicio, la AIE augura un descenso en la demanda de queroseno para los aviones de unos 3 millones de barriles diarios en 2020 y un alza de un millón de barriles en 2021.